Las pasadas vacaciones de Semana Santa nos pasamos por el valle de Ordesa para preparar un posible ascenso al Monte Perdido en julio.
Se trata de subirlo por la normal desde el refugio de Goriz pero en nuestro caso tenemos un handicap que hace la excursión un poco más interesante: la Orhy (nuestra perra).
Con ella se hace imposible pernoctar en el refugio, por lo que haremos un vivac cerca del mismo y para llegar hasta allí tenemos que ascender por el paso conocido como las Clavijas de Soaso junto a la famosa cascada de Cola de Caballo. No es una trepada excesivamente complicada, sobre un tercer grado superior en el punto más peliagudo y además está equipada con varias clavijas y cadenas que lo hacen muy cómodo, pero los movimientos son demasiado amplios para la perra en algunas zonas y el "patio" (sensacion de vacio) es importante.
Total que decidimos acercarnos por allí para estudiar el tema y hacer alguna prueba antes de empezar con la planificación en serio.
(Tengo que reconocer que un poco más a la derecha de las clavijas hay un paso para evitarlas por un senda que sube en zigzag hasta la misma cornisa, pero es bastante menos interesante.)
La idea original era llegar hasta la Cola de Caballo por la senda de los cazadores, pero estaba cerrada por acumulación de nieve y al final subimos por el camino normal siguiendo el curso del río Arazas.