Antes de ayer por la tarde decidí probar suerte, y salir a fotografiar este fenómeno atmosférico llamado nubes nacaradas y que en la península nunca lo habíamos visto; por lo menos sabiendo lo que veíamos. El caso es que me imaginé una fotografía impresionante de mi ciudad, con los colores cálidos del atardecer, las nubes bajas todavía iluminadas por los últimos rayos rojizos del sol, y en lo alto, como fondo del cielo los destellos nacarados de este fenómeno que habitualmente se puede observar en las regiones circumpolares, producido por nubes troposféricas que contienen ácido nítrico.
El lugar elegido es una pequeña montaña próxima a la ciudad que permite divisar el Valle medio del Río Vinalopó dominado por el Castillo Árabe de Petrer, desde este mismo lugar ya hice una panorámica nocturna que me permitió ganar el primer premio del Concurso de FotoPetrer, no sé si la recordáis: